¡El otoño pasado fue la primera vez que comí caquis y me enganché desde entonces! Si bien me gusta que mi Fuyus esté cortado simplemente, decidí hacer algo diferente con los Hachiyas. Encontré una receta de mousse de calabaza en http://www.foodiecrush.com/2012/10/mascarpone-pumpkin-mousse-cups-recipe/ y decidí adaptarla para mi mousse de caqui. Tuve que esperar unas buenas tres semanas antes de poder probar esta receta, ¡porque ese es el tiempo que tardaron los Hachiyas en preparar! Pero definitivamente TIENES que dejar que se vuelva súper suave y se deshaga, si lo apresuras, tu mousse estará granulada y astringente y no quieres eso, ¿verdad? Así que ten paciencia y serás recompensado con una mousse que no solo se ve genial sino que también sabe y huele realmente delicado. ¡Disfrutar! —Madhuja
Corta las Hachiyas y pásalas por un molino de alimentos. También puedes sacar la carne de los Hachiyas y luego hacerlos puré, solo asegúrate de no tener ningún trozo de piel allí. Agrega el azúcar al puré de caqui. Dejar de lado.
Ponga aproximadamente una pulgada de agua a fuego lento en una olla pequeña. Coloque las yemas de huevo en un tazón pequeño a prueba de calor y colóquelo sobre la olla con agua hirviendo a fuego lento. Asegúrese de que el agua no toque el fondo del recipiente. Con una batidora de mano eléctrica o un batidor, bata las yemas de huevo hasta que cambien de color a un amarillo pálido y se vuelvan mucho más espesas, aproximadamente 3-5 minutos. Para estar absolutamente seguro de que no hay trozos de huevo cocidos allí, recomiendo encarecidamente pasar la mezcla por un colador de malla fina. ¡Esto garantizará que su mousse quede suave y cremosa! Dejar enfriar.
En el tazón de una batidora de pie, agregue las claras de huevo. Batir hasta que forme picos suaves. Dejar de lado.
Usando el mismo recipiente (sin lavar), bata la crema espesa hasta que quede rígida. Dejar de lado.
En el mismo bol (sin lavar) agregue el puré de caqui, las yemas de huevo batidas y el queso mascarpone. Licúa hasta que todo esté bien combinado.
En un bol grande agregue la mezcla de caqui y la nata montada. Dobla todo muy, muy suavemente hasta que no queden rayas blancas visibles. Agrega las claras de huevo batidas y vuelve a doblar todo muy suavemente. ¡No revuelvas demasiado o desinflarás todo el aire que has incorporado a tu mezcla!
Refrigera por un par de horas. Servir frío. No recomendaría preparar este postre con mucha anticipación, ya que la mousse se vuelve turbia al segundo día. Entonces, ¡hazlo y devoró el mismo día! ¡Disfrutar!